Secundaria

Somos una comunidad educativa marista que promueve el desarrollo de competencias y de pensamiento, utilizando las cinco dimensiones del aprendizaje de Marcelino:

El Espíritu de Familia comprendido como la afirmación de pertenencia a una familia de la cual emana el amor, la ayuda mutua, la alegría y la acogida al pluralismo y a la diversidad, aceptando a todos como diferentes y complementarios.

La Presencia comprendida a partir de la búsqueda de un ambiente de armonía, cuidado y respeto, por medio de la presencia atenta y disponible en los ambientes en que se desarrolla la misión. También, se comprende como elemento importante de la pedagogía marista en la proximidad con las personas y en el cultivo de la relación de confianza.

La Espiritualidad definida como la vivencia a partir del Evangelio, teniendo a María y a San Marcelino Champagnat como inspiradores de nuestra forma de ser y de actuar. La Espiritualidad es la fuerza motora que le da sentido y armonía a la vida, ilumina la comprensión del mundo y orienta a la persona en su relación con Dios, consigo misma, con las personas y con la naturaleza.

La Sencillez es definida como un estilo de vida sencilla en la esfera personal e institucional. También se traduce en la búsqueda por la autenticidad, permitiéndole al sujeto reconocer las propias potencialidades y limitaciones. Tiene como una de sus formas de manifestación el respeto por el otro.

La Solidaridad se manifiesta por la sensibilidad a las necesidades de las personas, de modo especial las de los pobres y excluidos. También se manifiesta en el compartir de dones personales y de bienes materiales, en la promoción de la paz, de la justicia y de la vida, como señal de esperanza en el mundo.